3 agosto
China dio un paso importante en el comercio cafetero al autorizar a 183 empresas brasileñas para exportar café al gigante asiático. La medida busca captar parte del volumen que tradicionalmente se dirigía a Estados Unidos, reconfigurando así los flujos comerciales globales.
Este movimiento fortalece la posición de Brasil como proveedor estratégico para China, un mercado en rápido crecimiento en consumo de café. Además, abre oportunidades para diversificar destinos y reducir la dependencia de compradores tradicionales, en un contexto de tensiones y cambios en el comercio internacional.
Para la industria, este ajuste podría impulsar nuevas inversiones en logística y adaptaciones en la oferta, especialmente en variedades y formatos que se ajusten al gusto del consumidor chino.
Para más información sobre este cambio en el mercado, consulta la nota completa aquí: Reuters
